miércoles, 9 de noviembre de 2011

ADULTERIO

Blingee

Por: Hna. Eyra Lezcano

La Palabra de HaShem, Baruj Hu dice en Mateo 5:27-29, 27 Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. 28 Pero yo digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón. 29 Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.

Bienvenidos queridos hermanos a este espacio, hoy trataremos sobre un tema muy importante, que nuestro Yetser hara (mala inclinación) ha disfrazado de muchas maneras, y es sobre el Adulterio. Etimológicamente hablando, (del latín adulterium), en su acepción más usada, se refiere a la unión sexual de dos personas cuando uno o ambos están casados con otra persona. Si usted es casado, y mientras lo está, usted tiene relaciones sexuales con otra persona, usted está cometiendo adulterio. Cometer adulterio no sólo incluye la comisión carnal del acto sexual con una persona diferente al esposo o la esposa, sino que se comete hasta con mirar y desear a una persona que no sea el cónyuge. Y podemos agregar también, que dicho problema nace en el corazón del ser humano, es allí donde está la raíz del mal, del pecado, de la concupiscencia.

Cuando una persona comete adulterio, no sólo lo hace con el cónyuge, sino que principalmente lo hace con Di-s, viola la santidad del Altísimo y la dignidad del afectado. La palabra del Señor no puede ser más clara, Di-s nos dice, el que no es conmigo, contra mí es. El que desobedece la palabra del Señor y hace que sus actos sean inicuos, contra Di-s está. Di-s nos dice en el libro de Proverbios 4:23 “Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida. 25 Tus ojos miren lo recto, y diríjanse tus párpados hacia lo que tienes delante. 26 Examina la senda de tus pies, y todos tus caminos sean rectos.

El hombre o la mujer adúltero, ha marcado para siempre su frente ante los ojos de Di-s. Su palabra nos dice: 32 Mas el que comete adulterio es falto de entendimiento; corrompe su alma el que tal hace 33 Heridas y vergüenza hallará, y su afrenta nunca será borrada.

Vivimos en tiempos extremos, donde se ha multiplicado la maldad de la humanidad, donde el amor hacia el prójimo es como tinieblas que se disipan, donde el respeto mutuo hacia los seres humanos son un mito, donde la ética y la moral son cuentos de abuelas, donde la familia es una empresa más, donde el gerente actúa a su conveniencia y despide al que no está de acuerdo con sus deseos pecaminosos, los cuales deberán cumplirse como regla establecida. Vivimos en tiempos donde no existe el amor, el amor entre seres que un día prometieron amarse aún en medio de adversidades ante los ojos del Creador, amor entre los hijos, de padres a hijos y de hijos a padres, amor entre hermanos, hermanos de sangre y hermanos en el nombre del Mashiaj (Mesías). ¡Qué duros tiempos estamos viviendo! Pero no nos debemos de sorprender, pues estas cosas, dice la palabra, que acontecerían.

¡Cuanto dolor padece nuestro Creador cuando le somos infieles! amándonos él tanto. ¡Cuánto dolor padece el cónyuge fiel cuando es traicionado! Cuando ha depositado su confianza en esa persona que es su misma carne y recibe iniquidad de parte de ella, maltratos físico y psicológicos constantes, mentiras tras mentiras, abusos, pero sepamos que esto ha llegado ante los ojos del Señor y han herido a ese Ser Santo, que todo lo ve, porque nadie podrá esconder su maldad delante del Señor, aquel que escudriña los corazones de los malvados y los corazones de aquellos que le aman, nadie podrá escaparse del juicio venidero, pues todos sus actos están registrados en el libro de memoria. Malditos serán con maldición dice Di-s para aquellos que le han traicionado, para aquellos que han pisoteado la preciosa Sangre de su Hijo amado Yeshúa. Malditos son aquellos adúlteros y adúlteras, que conociendo la palabra del Señor, se han vuelto atrás, pero ellos recibirán su castigo, porque está establecido en la Biblia en el Libro de Hebreos 10:26-27: “Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios”. Si esta advertencia es para su pueblo amado, cuanto más para la humanidad.

Si usted es infiel y está en esta condición y ha permitido que more dentro de usted el espíritu de engaño, prepárese, porque horrenda cosa es caer en manos del Di-s vivo. Di-s es amor, pero también Di-s es justicia. No crea que su pecado de adulterio será pasado por alto. ¡Semejante desprecio ha hecho usted por la Sangre que Yeshúa derramó por sus pecados! ¡Semejante desprecio le ha hecho usted al Espíritu Santo de Di-s cuando redargüía en su mente, advirtiéndole del peligro! ¡Semejante desprecio ha hecho usted a Aquel que desde el vientre de su madre lo escogió para su salvación! ¡Pídale a Di-s que tenga misericordia con usted y arrepiéntase! Sepa hermano o hermana, que algunos nacieron para perdición, son los hijos de desobediencia y esto, mi amado hermano, es el anticipo del mismísimo lugar de fuego, el pecado de adulterio acarrea la muerte. Porque la misericordia del Señor son para aquellos que él decida dar, su palabra no miente, y nos dice en I Reyes 8:23 “Jehová, Di-s de Israel, no hay Di-s como tú, ni arriba en los cielos ni abajo en la tierra, tú que guardas el pacto y la misericordia a tus siervos, los que andan delante de ti con todo su corazón. Ay de aquellos que saben hacer lo bueno, pero hacen lo malo.

El adulterio viola ocho (8) de los diez (10) mandamientos de la Ley de Di-s, así tenemos que según la Versión Judía, en el Libro del Éxodo nos dice:

Éxodo 20:3

Segundo Mandamiento

No tendrás Dioses ajenos delante de mí. No te harás imagen, ni ninguna semejanza de cosa que esté arriba en el cielo, ni debajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra: No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; Porque yo soy el Señor tu Di-s, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos, sobre los terceros y sobre los cuartos, a los que me aborrecen. Y que hago misericordia en millares a los que me aman y guardan mis mandamientos.

El que comete adulterio hace que esa tercera persona sea para él o ella un dios más, pues ha despreciado todos los preceptos divinos por seguirle, honrarle, adorarle, aborreciendo al Creador y despreciando el regalo más preciado que es la vida eterna.

Éxodo 20:7

Tercer Mandamiento

No tomarás el nombre de El Eterno tu Di-s en vano; porque no dará por inocente Di-s al que tomare su nombre en vano. En el altar, durante la ceremonia de matrimonio, la pareja ha prometido al Espíritu Santo de Di-s ser fiel a su cónyuge, amarlo y respetarlo en abundancia y escasez, en salud como en enfermedad, en alegrías y adversidades, todo esto en el nombre de Di-s, sin embargo, cuando se comete adulterio, rechaza también la promesa que hizo en el nombre del Altísimo.

Éxodo 20:12

Quinto Mandamiento

Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que el Eterno tu Di-s te da. El que comete adulterio, no honra a su padre, porque vergüenza es para él, y menos honra a su madre, porque siendo ésta una mujer, sufre los desprecios de su hijo para con otra mujer, o los desprecios de su hija, para con otro varón.

Éxodo 20:13 Sexto Mandamiento

No matarás. El que comete adulterio, mata los sueños de amor, las esperanzas de un futuro mejor, de ver crecer juntos, en unión, a sus hijos. Mata todo aquello que es de buen nombre en su vida, aquello que con esfuerzo se ha construido, un hogar, un status digno ante la sociedad para no avergonzar la Santa y Bendita Palabra.

Éxodo 20:14

Séptimo Mandamiento

No cometerás adulterio. Expresamente está escrito en la Biblia, en los mandamientos, el que comete adulterio viola también este precepto de nuestro Señor.

Éxodo 20:15

Octavo Mandamiento

No hurtarás. El que comete adulterio hurta el hombre o la mujer de su prójimo.

Éxodo 20:16

Noveno Mandamiento

No hablarás contra tu prójimo falso testimonio. El que comete adulterio levanta falso testimonio de su cónyuge, porque bien es sabido que el que anda en adulterio, habla mentiras para engañar, para conquistar, para seducir, se convierte en un mártir. Sabemos que hay diferencias entre una pareja, pero con el diálogo, la comunicación, con amor verdadero y con deseos de cambios por parte de ambos, poniendo la mirada en nuestro amado Mesías, un matrimonio es bendecido.

Éxodo 20:17

Décimo Mandamiento

No codiciarás la casa de tu prójimo, no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo. Este mandamiento está muy claro, el que comete adulterio viola también este precepto.

El matrimonio conforme a la voluntad de Di-s es hasta que la muerte los separe. Di-s no está de acuerdo con el divorcio, para Di-s el divorcio no es una opción, tanto así que en Malaquías 2:16 nos dice: 16 Porque el Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio, y al que cubre de iniquidad su vestido, dijo el Di-s de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales. Ahora, si usted es el cónyuge afectado por el adulterio de su pareja, Di-s no te ha llamado a semejante esclavitud. La palabra de Di-s nos dice: ¿Andarán dos juntos, si no estuvieren de acuerdo? (Amós 3:3) Y así andan muchos matrimonios que dicen estar conformes a la voluntad del Creador, pero el estar de acuerdo con Di-s, significa no estar de acuerdo con el mundo, significa respetar tu matrimonio, serle fiel a tu pareja, andar en integridad y santidad, nadar contra la corriente, como los salmones. No estar de acuerdo con las maneras del mundo, con la forma de ser de aquellos que se creen sabios, más viven en injusticia e impiedad. Estar de acuerdo con Di-s es cambiar tu manera de pensar y actuar, es no despreciar al Creador, nuestro Di-s, pues él no nos ha llamado a secundar el pecado, a perpetuar el pecado, a ser cómplice del pecado, porque mi amado, si usted acepta esa manera de vivir de su cónyuge, usted también está en pecado. La palabra de Di-s nos dice en 2 Corintios 6:14 “No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿y qué comunión la luz con las tinieblas? Y en el mismo capítulo, verso 17 nos dice: Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo inmundo; y yo os recibiré, y seré para vosotros por Padre, y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso” La Palabra de Di-s te dice, escapa por tu vida, ahora que estás a tiempo. No vayas tú también a pisotear la Preciosa Sangre de el Mashiaj por alguien que ante los ojos del creador es tinieblas, no es nada, se desvanece.

Hermano, hermana o amigo, si estás siendo afectado por el pecado de adulterio y el Señor ha permitido tu arrepentimiento, entonces dale las gracias a Di-s, postra tu rostro ante sus pies y pídele una y mil veces perdón, él sabrá de tu verdadero arrepentimiento y te levantará, él sabrá cómo restaurar tu hogar, cómo sanar el corazón destrozado del ser que te dio para tu deleite, para tu compañía. Sepa mi amado, que en el mundo tendremos aflicciones y pruebas, pero lo más importante es salir vencedor, es ser sabio ante el llamado del Espíritu Santo para no volver a caer, una y otra vez, porque el amor de Yeshúa el Mashiaj, reconcilia y perdona.

Para finalizar mis amados hermanos, les presento algunos versos bíblicos hermosos, que nos ayudarán a conocer más de ese inmenso amor que tiene Dios para con aquellos seres que él decidió que vivan en unión matrimonial, en pareja, hasta que la muerte los separe.

1 Pedro 3:7 “Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.

Colosenses 3:18 “Casadas, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor. 19 Maridos, amad a vuestras mujeres y no seáis ásperos con ellas”

Proverbios 3:13 “Bienaventurado el hombre que halla la sabiduría, y que obtiene la inteligencia, 14 Porque su ganancia es mejor que la ganancia de la plata, y sus frutos más que el oro fino”

No hay comentarios:

Publicar un comentario