CONOCIENDO AL MESÍAS POR LAS RAÍCES HEBREAS
(MI PUEBLO NO AVANZA POR FALTA DE CONOCIMIENTO… OSEAS 4:6)
(MI PUEBLO NO AVANZA POR FALTA DE CONOCIMIENTO… OSEAS 4:6)
YESHUA, EL MESÍAS DE ISRAEL
¿POR QUÉ USAMOS EL NOMBRE YESHUA EN LUGAR DE JESÚS?
Usamos el nombre
Yeshua en lugar de Jesús, porque ese es el nombre hebreo original. El nombre
Jesús es una traducción gentilizada, tanto anglo como hispana, del origen
hebreo Yeshua, que significa “SALVACIÓN”. Yeshua nunca oyó durante su
Ministerio Público que le llamaran Jesús. “El siempre fue nombrado por sus
caracteres hebreos, porque era y es judío”.
Como los nombres
propios de una persona, reglamentariamente no se traducen, por respeto y
consideración a la identidad de una persona; creemos que en el caso del Mesías,
su nombre, con más razón aun, debe ser mantenido en su forma original.
En adición, debido
al hecho de que usando el nombre “Jesús”, el cristianismo histórico casi
destruye totalmente al pueblo Judío/hebreo, primero gentilizando a los fieles judíos
que sobrevivieron los ataques y persecuciones romanas, después con la
inquisición, luego con las cruzadas, después con la Reforma Protestante del
siglo XVI, para seguir con el “Holocausto”; que realmente no debe llamarse así,
pues en la Torah, un holocausto es un sacrificio agradable al Dios de Israel, y
lo que hicieron con Su Pueblo fue un Genocidio, algo cruel y despiadado.
Finalmente, con el
antisemitismo occidental del cristianismo histórico, el nombre “Jesús”,
tristemente, ha venido a ser símbolo de persecución y muerte para el Pueblo
Judío, distorsionando la verdad acerca de la figura gloriosa de nuestro Yeshua
El Mesías. Entonces, para establecer la diferencia, preferimos nombrarlo bajo
la forma original hebrea: Yeshua, sin que represente una barrera, pero si, una
distinción necesaria.
Recordemos que
nuestro Señor y Salvador Yeshua es judío, el cual celebraba las Fiestas,
incluyendo Shabbat, y era respetuoso de la Torá (La Ley). Él es nuestro modelo
a seguir. Él mantenía su identidad judía, en su vestir, en sus costumbres. Él
asistía todos los Shabbat (sábados) a la Sinagoga a estudiar Torá.
¿POR QUÉ SE USA EL NOMBRE MESÍAS EN LUGAR DE
CRISTO?
Algunos creyentes
creen que “Cristo” es como el segundo nombre de Yeshua, así como en la cultura
hispana alguien se llama Juan Carlos. Realmente, “Mashíaj” (Mesías) es el
título reservado en la Escritura, para el Rey de Israel prometido a David. Así
como al que sirve como “líder” o “cabeza” de una nación se le llama
“Presidente”, así también es “El Mesías” un título Real. Este título viene de
la raíz hebrea “Mashíaj” que significa “El Ungido”; pero cuando se tradujo al
griego pasó como “Kristos” y finalmente al español como “Cristo”. Kristos
significa “untado” y viene de la época cuando los obreros finalizaban el día en
su trabajo con los olivos, y quedaban untados o manchados de aceite. El
traductor cuando tuvo que traducir la palabra hebrea Mashíaj al griego, no
encontró el significado correcto y lo asoció con el trabajo de los obreros en
los olivares. Mashíaj significa ungido y Kristos significa untado, por lo tanto
vemos que la palabra Cristo, que viene de Kristos, no abarca la interpretación
correcta del rol que cumplirá Yeshua Ha Mashíaj.
Debido al hecho
que el término “Mesías” (El Ungido) es más exacto a su forma original, que
viene de la raíz hebrea “Mashíaj”, los que deseamos estudiar la Biblia a través
de las Raíces Hebreas, preferimos llamarlo de la manera original: Yeshua Ha
Mashíaj (Yeshua El Mesías).
¿POR QUÉ LLAMARSE “MESIÁNICOS” Y NO “CRISTIANOS”?
El término
“cristiano” originalmente significó: “Seguidores de Cristo” y fue una de las
maneras como los romanos de Antioquia llamaron a los convertidos gentiles,
Crónicas de los Apóstoles (Hechos) 11:26, (Versión Textual Hebraica):
Y se congregaron
allí todo un año en la comunidad; y enseñaron a muchos gentiles que se hicieron
discípulos y los griegos les llamaron Jrist’yanous* por primera vez en
Antioquia.
* Esto es,
“mesianistas” o “mesiánicos”; al traducirse al griego, quedó como Xrist’yaná de
Xristós, la traducción del hebreo Mashíaj al griego coiné, según aparece en un
manuscrito arameo. Se tradujo luego al castellano como “cristianos” y desde
entonces, el término identifica a los conversos de entre los Benei Nóaj
(naciones gentiles) para diferenciarlos de los netzarim, los discípulos del Rábi
de entre los judíos. Eventualmente, los cristianos fueron identificados como
notzrim.
“Cristianos” les
llamaban a los creyentes de origen gentil y no necesariamente a los creyentes
en Yeshua de origen judío que fueron reconocidos por diversos nombres, siendo
quizá el más distintivo el de “discípulos” (talmidim) de Yeshua, pertenecientes
a la “secta de los Netzarim o la secta de los del Camino”, Crónicas de los
Apóstoles (Hechos) 9:1,2; (Versión Textual Hebraica):
Para este tiempo,
Shaúl, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Adón, vino al
sumo sacerdote, y le pidió cartas de autoridad para las sinagogas de Damasco, a
fin de que si hallase algunos hombres o mujeres del Camino*, los trajese
arrestados a Yerushaláyim.
* Del hebreo
HaDerek. Con este vocablo Hilel (Lukas) designa al partido hasídico formado por
Yeshua, al cual todavía no se les había dado entrada a los gentiles. Era hasta
entonces, una secta judía entre las otras sectas de aquellos días. El término
secta, para entonces, no tenía la connotación negativa que ahora tiene.
Significa “los que eran de una misma opinión” y formaban un partido religioso
propio.
Sabemos que
“secta” en el tiempo de Yeshua, se le llamaba a un grupo, dentro de otros
grupos, que sostenían y defendían ciertos principios que eran vistos como
distintivos, dentro de un grupo mayor.
EL MESIANISMO
afirma que Yeshua es el Mesías de Israel; Primero en su rol como Mesías
sufriente Mashíaj ben Yosef y luego cuando reaparezca otra vez, en su rol
como Mesías triunfante Mashíaj ben David . Por circunstancias históricas,
los romanos siguieron llamando a los gentiles que confesaban la fe en Yeshua El
Mesías, como “cristianos”, y eventualmente, el término fue popularmente
acuñado. Tristemente, con el paso del tiempo, el concepto cristiano comenzó a
ser distorsionado, dejando de ser un ex gentil seguidor del Mesías, que se
había unido a los judíos creyentes también en Yeshua El Mesías, para ser uno
que había abrazado la fe del cristianismo, como era entendido por Roma. Cuando
las autoridades de Roma juntaron el poder religioso al poder político en el
siglo IV, obligaron a los judíos que aceptaban que Yeshua era El Mesías, a
renunciar a sus raíces hebreas y su cultura dada por El Eterno, es decir, dejar
de ser judíos para venir a ser “cristianos”, según Roma.
El mesianismo
bíblico cree que al encontrar al Mesías, las personas siguen siendo judíos o
israelitas completos y que no tienen que renunciar a su cultura bíblica, porque
se trata de una cultura divinamente revelada por medio de Moisés y los Profetas
y exaltada en su máxima expresión en Yeshua mismo. Consecuentemente, nos
identificamos con el nombre de “mesiánicos” para destacar que como judíos,
israelitas o ex gentiles, creyentes en Yeshua El Mesías, nos identificamos con
un pueblo que nunca ha dejado de ser el Pueblo del Dios de Israel, con una
cultura que nunca ha sido abolida y con una libertad para expresar nuestra fe;
y usar el término mesiánico, nos identifica plenamente con Yeshua nuestro
Mesías, por la vía de Jerusalem y no por la vía de Roma, que creó el
cristianismo histórico, como hoy día es conocido en el mundo.
Sin embargo,
reconocemos que cada creyente tiene el derecho de identificarse como mejor
corresponda con su llamamiento, y que un CREYENTE NACIDO DE NUEVO es totalmente
nuestro hermano en la fe.
En la Epístola del
Apóstol Pablo a los Efesios 2:14 (Versión Textual Hebraica) leemos: “Porque él es nuestro shalom,
que de ambos pueblos formó una unidad, derribando la pared intermedia de separación: la enemistad”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario