miércoles, 25 de abril de 2012

EL LLANTO DE LA MUJER




"El llanto de la mujer"
Por Rab. Rafael Freue Shelita
La Visión de la Torá sobre el Matrimonio

El Shela Hakadosh comenta en Perasha Vaiese: "El hombre debe comportarse con humildad y tranquilidad en su hogar. No debe obligar a su esposa a realizar cosas que ella no desea, sino que debe hablarle siempre de buena manera. Así dijeron los Jajamim: Quien tiene Shalom (paz) en su hogar, es considerado como si estuviera en Shalom con todo el mundo. El Zohar Hakadosh comenta al respecto: "El hombre debe comportarse en su hogar con tranquilidad y alegría sin que teman de él". El hombre es el que dirige su hogar y por lo tanto la responsabilidad del Shalom recae sobre sus hombros. Esta obligación se manifiesta de dos formas: 1) sus expresiones deben ser dulces y suaves, llenas de tranquilidad y comprensión. No deben ser con tensión, nerviosismo ni ofensivas. 2) su comportamiento y actitudes deben ser con gracia y serenidad, a pesar de las situaciones que se puedan presentar.

El Talmud, en Babá Mesiá 59 comenta al respecto: "Siempre el hombre debe cuidar de no hacer sufrir con sus expresiones a su mujer". El mismo Talmud explica el motivo especial que existe en este caso: la mujer es por naturaleza muy sensible. La prueba contundente de ello es que su llanto es más frecuente y espontáneo que el del hombre. Por lo tanto, es obligación de cada marido alegrar a su esposa y no hacerla sufrir con sus actitudes o expresiones, ya que su dolor es mucho más profundo que el del hombre. Se debe tener presente en cada circunstancia de la vida el precepto de la Torá: "No hará sufrir el hombre a su compañero" (Vaikrá 25).

Hasta tal punto llega este concepto, que incluso quien hace sufrir a su señora sin haber tenido esa intención puede recibir un castigo, como podemos observar en el siguiente suceso que relata la Guemará en Ketubot 62: "Rab Rejumi regresaba a su hogar todos los años en la víspera de Iom Kipur, luego de permanecer durante mucho tiempo estudiando en un Bet Hamidrash, ubicado lejos de su casa. En una oportunidad, se concentró tanto en su estudio que se retrasó del horario normal en el que solía regresar. Su esposa esperaba ansiosa y preocupada: ‘¿Cuándo llegará mi esposo?’. A cada instante decía: ‘¡Ya llegará, ya llegará!’. Su dolor hizo que en un momento determinado se derramaran unas lágrimas de sus ojos. Su marido seguía estudiando profundamente en el altillo de la Ieshibá y en forma imprevista, se derrumbó el techo sobre él y falleció instantáneamente".

Este terrible suceso es explicado por el Rab Jaim Shmulevich Z"L en su libro "Sijot Musar" de la siguiente forma: "El castigo que recibe quien hizo sufrir a su compañero no es simplemente para tranquilizar al perjudicado, puesto que, como vemos en este caso, la muerte de Rab Rejumi habrá provocado muchas más lágrimas a su señora que las que había derramado anteriormente. El concepto real es que la ofensa o el daño al prójimo es como un fuego que consume: todo el que pone su mano en él se quema. No se trata sólo de un castigo por su actitud, sino que es una ley natural y real".

Sucedió en una oportunidad con Ribí Zalman Malsu Z"L, que estaba viviendo en la casa de una familia, y fue a visitarlo un alumno suyo con quien se puso a conversar palabras de Torá. En un momento, el alumno vio que su maestro se levantó y rápidamente salió fuera de la casa. El alumno siguió al Rab y le preguntó el motivo de su actitud. La respuesta fue: "La mujer que trabaja en la limpieza de la casa comenzó a cantar y está prohibido escuchar cantar a una mujer; por eso me retiré". El alumno le sugirió al dueño de la casa que le pidiera a la mujer que dejara de cantar para que el Rab pudiera ingresar. El Rab instantáneamente respondió: "¡Déjenla, ella está ocupada con su trabajo! Está feliz con lo que hace y soy yo el que no puede escucharla. ¿Por mí debe sufrir? Yo debo salir para que ella siga cantando".

Aprendemos de este suceso hasta qué punto debemos cuidarnos de no hacer sufrir al otro, a pesar de que la intención sea cumplir con algún precepto. Con mucha más razón, que el hombre no debe hacer sufrir a su mujer, ni provocarle un dolor o avergonzarla, ya que se provoca de esa forma un daño a sí mismo.
  
Nuestros Sabios nos enseñan que los primeros días del matrimonio marcan una senda para toda la vida. Los primeros siete días del matrimonio son días de celebraciones y banquetes, en los cuales se alegran los novios y sus parientes. Y esos banquetes no son sólo para saborear ricas comidas, sino principalmente para agradecer a Hashem por la boda, y para aprovechar la ocasión invitando a los parientes y amigos a participar de la alegría. Se cumple una gran Mizvá al asociarse en ella.

La Simjá de los Siete Días de Banquetes (Sheba Berajot-Siete Bendiciones), tiene su antecedente en la Torá. En el libro Pirke Deribi Eliezer figura que lo aprendemos de lo que está escrito en la Perasha de esta semana, cuando Iaacob contrajo matrimonio con Lea, luego de lo cual se celebraron siete días de banquetes. En esa oportunidad, se congregaron todos los habitantes del pueblo a celebrar. Dijo entonces Hashem: "Ustedes le hicieron un favor a mi siervo Iaacob (de acompañarlo en su alegría). ¡Yo les daré a ustedes una recompensa eterna a través de vuestros hijos!".

También hemos visto una celebración de "Sheba Berajot" en el Libro de los Profetas, cuando Shimshon se casó y le organizaron siete días seguidos de banquetes, y lo trataron como a un verdadero rey.

Esto nos enseña que el novio y la novia son considerados como reyes en los días de Sheba Berajot. Así como todos alaban a un rey, también a los novios (dentro de los primeros siete días) los alaban y les rinden honores de reyes. Así como un rey se viste con ropas majestuosas, del mismo modo los novios se visten con ropas de fiesta todos esos días. Así como a un rey se lo recibe con banquetes, a los novios se los recibe con los mejores manjares. Así como el rey no trabaja, los novios no trabajan. Así como a un rey siempre se lo ve radiante, a los novios se los ve resplandecientes como el sol. Como está escrito: "(El sol) es como un novio que acaba de salir de su Jupá" (Tehilim 19).

Los días de Sheba Berajot son como una expresión de deseos: así como los primeros días del matrimonio son de fiesta y celebraciones, que todos los demás días de matrimonio de la nueva pareja sean igualmente de fiesta y alegría.

Analicemos para finalizar algunos consejos escritos en el libro "Una vida de felicidad" del Rab Shelomo Dob Cohen Shelita, que sirven para alcanzar el éxito en el matrimonio:

1) Aprovechar la fuerza interna que cada uno posee y sacarla a la luz en la vida matrimonial.

2) Comportarse con paciencia. Saber que no es posible esperar resultados maravillosos de un instante al otro. Se debe mejorar paso a paso para así llegar a la verdadera felicidad en el matrimonio.

3) Asumir las responsabilidades: cada uno debe tratar las situaciones que se presenten con el máximo de seriedad para obtener así los mejores resultados.

4) El buen trato: hay que recordar que todos tenemos faltas y la solución se encontrará sólo si la otra parte toma el problema como si fuera suyo propiamente y no se limita a marcárselo a su pareja sin ayudarla a superarlo.

5) Medicina preventiva: no esperar a que los problemas aparezcan para ver cómo solucionarlos, sino que se deben estrechar las relaciones en los momentos buenos para formar así un escudo que impedirá que se deterioren en los momentos más críticos.

6) No desesperarse por los tropiezos: cuando un niño comienza a caminar es normal que tropiece y se golpee. En forma similar, un matrimonio que intenta mejorar su relación, se encontrará con situaciones que aparentemente son retrocesos o caídas. No solamente que no hay que desesperar, sino que se deben aprovechar para levantarse con más fuerza y superarse continuamente.

7) Reconocer el esfuerzo del otro: cuando un integrante de la pareja intenta superarse, el otro debe alentarlo para seguir adelante y no debe criticarlo por los errores que pueda cometer.

La felicidad en el matrimonio no depende de que no se presenten pruebas en la vida, sino de la buena relación y de la unión de la pareja en todas las situaciones que se deban atravesar. Todos los comienzos son difíciles. No es sencillo intentar mejorar nuestras actitudes, pero si no lo hacemos la vida matrimonial estará llena de tensión y amargura. Pongamos en práctica los consejos de nuestros Jajamim y con seguridad, nuestra vida será otra completamente.

¡Qué Hashem bendiga nuestros hogares con el Shalom!

MI BÚSQUEDA NO ES FÁCIL


Es mi propósito, publicar este hermoso poema,  con el propósito de reforzar los matrimonios, que tengan shalom como complemento primordial para que el amor florezca y continúe así hasta que El Eterno lo disponga. Espero les agrade.


MI BÚSQUEDA NO ES FÁCIL

Mi búsqueda no es sencilla, porque busco a una mujer,
a la que poder amar y amándome se deje amar.

Busco a una mujer que sea perfectamente imperfecta... Como yo.
Porque equivocarse es bueno, nos enseña a ser más humildes.

Sueño con la mujer que me consuma en las caricias de su mirada,
que me dibuje una sonrisa de amor en cada despertar…

Busco esa mujer que siendo fuerte, sea tierna,
amante de las cosas más simples,
que sea capaz de amarme en la distancia,

Busco esa mujer, que no crea que el sexo,
es todo en la vida, si no una parte mas del amor…

Una mujer que me quiera por la que soy,
que acepte mis errores, que los comprenda,
y a su vez, me desnude su alma,
que me deje asomarme a sus sueños sin miedo…

Quiero que esté a mi lado, en las penas y las alegrías,
que su fuerza, sea el motivo de mi fortaleza.

Quiero una mujer, capaz de estremecer su piel con un te quiero,
capaz de derramar una lágrima de felicidad, con un te amo.

Una mujer que siendo libre no tema atarse a mí...
Que su curiosidad no tenga fin,
curiosidad por descubrir mi alma….

Una mujer que sin miedo a amar,
me abrace cuando la pena embargue mi corazón.

Una mujer capaz de amarme toda la vida,
que su inmortal amor, no tenga fin.
A quien yo pueda amar, más que a mi propia vida.

Que además su recuerdo lacerante habite en mi corazón,
que ahuyente la soledad de nuestro camino,
que ya nunca más quiera estar sola.

Quiero vivir en su recuerdo,
que su corazón lata por los dos.

Busco y sigo buscando a ese amor,
por el cual yo despertaría entre sus brazos.

Un amor tan candido, que sonroje ante un beso,
un corazón de taimada esperanza,
que anhele amar y ser amado,
sin más deseo que sea feliz junto a mí.

Mi búsqueda no es fácil, pero te encontraré…

Duende.

martes, 24 de abril de 2012

בעזהי״ת יהושע בן יוסף מנצרת


בעזהי״ת
יהושע בן יוסף מנצרת
Introducción sobre Iehoshua Ben Iosef de Natzrat
Maor BaOlam
Introducción
Es un error pensar que los Talmidim Rishonim (primeros discípulos) de Iehoshua de Natzrat nunca antes habían visto o conocido a Iehoshua y que ‘por arte de magia’ él les dijo: ‘síganme’ y ellos le siguieron. La realidad es que los escritos de los primeros discípulos narran que Iehoshua de Natzrat desde joven se dedicó al buscar de Avinu shebashamaim y de Su Torá; de tal manera que se distinguió en ser un jajam (sabio) en la Torá, y por ende los talmidim que luego le siguieron ya lo habían oído enseñar Torá, de manera que cuando él los invita a ser sus talmidim, ya ellos tenían cierta noción de quien era él, de hecho los Shnem Asar (los 12) eran residentes en Galil al igual que Iehoshua. Por otra parte, hubieron otros talmidim que aunque no habían conocido a Iehoshua previamente, es obvio que tuvieron que oír acerca de él antes de decidir seguirlo. Aun sin querer ser un talmid (discípulo) de Iehoshua, todo Israel debe tener conocimiento de quien es el M’shiaj HaEl (el Ungido del Eterno). He aquí una breve introducción sobre Iehoshua de Natzrat.

Iehoshua de Natzrat

Iehoshua (conocido también como Ieshua en arameo) es el hombre más ‘conocido’ mundialmente, a pesar de los casi dos mil años de su ausencia física entre nosotros, su enseñanza ha trascendido los tiempos y ha seguido influyendo en todo el mundo como ningún hombre jamás ha podido. Iehoshua y su enseñanza han impactado no solo en el ámbito hebreo, sino en el resto del mundo, de manera que los de las naciones han marcado una Era (E. Común) que comienza con su nacimiento según sus cálculos.

Para comienzos del siglo I EC., ya hacían aproximadamente doscientos años que los Macabeos habían luchado contra la dominación Siria en la región de Iehudá, y el resultado había sido un breve estado de independencia del dominio extranjero (142 - 63 A.E.C.), pero esta independencia cesó con la llegada de los romanos a Israel. Lo peor que sucedía en Israel era que estaba dividido interiormente, muchos grupos (Fariseos, Saduceos, Esenios, etc...) con diferentes ideas e interpretaciones acerca de una sola Torá. Es en esta época que en Bet Lejem de Iehudá nace Iehoshúa Ben Iosef (aprox. 5 A.E.C), en el ceno de una familia real, descendientes de David haMelej [1], hijo de Iosef Ben Iaaqov. Nace exactamente en Jag haSukot (la Santa Convocación de las Cabañas) por un milagro del Eterno, siendo el planeta Tzédeq [2] la señal de su nacimiento. Se cría en Natzrat, una ciudad en la región de Galil, y aprende el oficio de Napáj [3].

Desde pequeño Iehoshuúa sobresalió por llevar una vida piadosa y dedicada a cumplir la voluntad de Avinu shebashamaim, y eso trasmitió a sus discípulos. A la edad de doce años mientras se preparaba para ser lo que hoy llamamos ‘Bar Mitzvá’ prefirió quedarse más tiempo en el Bet haMiqdash sentado con los Maestros de la Torá, escuchándolos y haciéndoles preguntas, mientras que todos los que lo oían se asombraban de su inteligencia y de sus preguntas, de esta manera el joven Iehoshua crecía en sabiduría, en estatura y en gracia ante el Eterno y los hombres.

A pesar de haberse criado en Galil, la región que mostraba una tendencia de ‘patriotismo guerrero’ más fuertemente que en cualquier otra región en Israel, en sus enseñanzas no vemos que Iehoshúa halla asimilado dicha tendencia, ni tampoco existe nada que indique que haya sido influenciado por la mentalidad griega que imperaba, sino que dedicó su vida al estudio de la Torah, buscando la Voluntad del Creador, lo cual demostró con fluidez al entablar conversaciones y discusiones con otros jajamim acerca de cualquier tema de la Torá y de la situación caótica en que vivía Israel.

Iehoshúa se muestra como un Jajam de Israel, no un filosofo de Grecia; es un Navi de Israel, no un profeta del mundo pagano, de manera que así como la enseñanza de los Nviim y los Jajamim de Israel, la enseñanza de Iehoshúa tienen el mismo mensaje de la Torá y los Nviim; por esto cuando le preguntaron: “Rabi, di cual es la mitzvá g’dolá de la Torá. Dijo: “Amarás ha HaShem con todo tu corazón, con toda tu néfesh, y con toda tu fuerza”. Esta es la primera [mitzvá]. La segunda es semejante a ella: “Amarás a tu prójimo como a ti”. "Sobre estas dos mitzvót cuelgan toda la Torá y los Nviim" [3]. En todas estas cosas y muchas otras Iehoshúa aparentemente es igual a los demás, pero a medida que vayamos profundizando en su vida como ejemplo, y también en su enseñanza, nos daremos cuenta de lo único que encontramos en él y en su enseñanza. Ya que su vida no fue otra cosa que un espejo de su enseñanza, no había ni hay distinción entre su persona y su enseñanza, toda su vida la dedicó y aún la dedica a ser un vivo ejemplo de su enseñanza.

Nosotros, sus discípulos, nos sentimos privilegiados de que Avinu shebashamaim nos permita tener tan grande Maestro, el mayor de todos, al cual Ungió para que fuese Melej Israel, y nosotros poder alcanzar ser sus discípulos, de tal manera que pareciera que su presencia está aun entre nosotros pues no hay día en que no digamos uno de sus sabios dichos, no hay día en que no se le recuerde, y no hay día en que su nombre no sea pronunciado entre nosotros. Mientras tanto pese a la añoranza de poder verlo y oír sus sabias palabras saliendo de su boca, sus discípulos no dejan de tener gozo y alegría, pues sabemos que hay una verdad, así como el Creador lo tomó de entre nosotros, así vendrá pues es necesario que los Cielos reciban hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, de las que habló Elohim por boca de sus Nviim haQdoshim desde un principio” (Maase HaShlujim Rishonim 3) [5].

Es la esperanza de sus discípulos difundir las enseñanzas de Rabenu haQadosh (nuestro santo rav) en estos días de restauración, porque aunque Iehoshua es el personaje más ‘conocido’, no es del todo comprendido. Debido al paso de los años (teniendo presente la Omnisciencia del Creador, bendito sea) su persona es mal entendida por algunos de poco conocimiento, solo sus fieles discípulos han preservado y trasmitido sus enseñanzas, mientras que otros tratando de comprenderlo pasan por alto ‘la época’ en que Iehoshua desarrollo sus enseñanzas, ‘el contexto’ de las mismas, y otras muchas cosas importantes que forman parte de su persona, y que si no se tienen presente es difícil comprenderlo en este siglo presente; otros tristemente, con menos comprensión que los anteriormente mencionados, dedican tiempo para publicar libros y artículos en contra de Iehoshua. Sin embargo es obvio que para miles tanto sus enseñanzas como su persona siguen siendo una ayuda para comprender al Creador, Elohe Israel, pero en especial para sus discípulos, porque él es el cumplimiento de las profecías que fueron dichas por los Nviím, él es el Mashiaj (Ungido por el Eterno), y por esto él a revelado nuevas profundidades y misterios de la Torá, de tal forma que pareciera que la Torah se renueva, y una vez más estamos en Har Sinai recibiéndola, pero esta vez con Ruaj haqódesh (inspiración de santidad), que el Eterno, bendito sea, da a todo aquel que como el Mashiaj se dedique a vivir la Torá.
Con la ayuda de Avinu shebashamaim, sean los escritos distribuidos por los Natzratim en Bet Midrash Maor Baolam útiles para traer luz a aquellos que ignoran, a aquellos que profesan seguirlo, inclusive a los que nos desprecian, y para que nosotros, sus discípulos, comprendamos aun más la responsabilidad que tenemos al ser sus discípulos, como él dijo: "Maor atem baolam (Fuente de luz son ustedes en el mundo). Una ciudad construida sobre la montaña no puede ser escondida. No encienden una Ner (lámpara) para ponerla en un lugar escondido donde no alumbre, sino que la pondrán sobre la Menorá (Candelabro) para que alumbre a todos los de la casa. Así alumbre sus fuentes de luces frente a todo ser humano, para mostrarles las buenas acciones de ustedes que son de alabanzas y de glorias para su Padre que está en los cielos." (Toldot Iehoshua, Pereq 14) [6].

NOTAS:

[1] Toldot Iehoshua 2 ('Mateo 1'); Iehoshua Maasav v’torató ('Lucas 1.26-33').
[2] Tzedeq, lit. Justo, paganizado a Júpiter.
[3] Tu fuerza (Meodeja
מאדך  Dvarim (Deuteronomio) 6.5, no ‘tu mente’ (Madaeja מדעך
[4] Napaj (
נפח herrero/trabajador con matales), el mismo oficio del personaje ‘Rabi Itzjaq Napaja’ (el herrero) citado en el Talmud Bavli, Shabat 126a; Ioma 42b, etc.
[5] Asimilado a Hechos 3.19-21
[6] Asimilado a Mateo 5.14-16
Bet Midrash Maor BaOlam

© 2005 Natzratim.com. “Introducción sobre Iehoshua Ben Iosef de Natzrat” puede ser distribuido con la condición de que no sea para la venta y ni sea modificado el contenido, incluyendo esta sección de 'copyright'.

YO SERÉ EL QUE SERÉ...


Yo seré el que seré! Y Elohim, Para Abraham, Itzjaq y Iaaqov, y en el nombre de El Shay ( me di a conocer a ellos) Y mi nombre YHWH no me di conocer a ellos.

PERLAS DE SABIDURÍA


Sucedió después de esto que por aquel tiempo cuando vio las compañias, subió la montaña y se sentó, entonces se acercaron sus discípulos 
y él comenzó a enseñar, y les habló diciendo: 

Dichosos los humillados de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos. 
Dichosos los que esperan, porque serán consolados. 
Dichosos los mansos, porque ellos heredarán la tierra. 
Dichosos los puros de corazón, ellos verán a Elohim.
Dichosos los que persiguen la paz, porque B'ne Elohim serán llamados.
Dichosos los que son perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
Dichosos son ustedes cuando sean perseguidos y les insulten diciendo toda clase de mal por mi causa pero falsamente. 

Regocíjense y alégrense porque vuestra recompensa es muy grande con el Eterno, pues así persiguieron a los N'viím. Rabí Iehoshúa Mi Natzrát ( Toldot Iehoshúa Pereq 13 Las Virtudes )

PERLAS DE SABIDURÍA


Antigonos de Sojo, que recibió la tradición de Shimon el justo decía: No seáis como servidores que sirven a su maestro pensando en su recompensa; más bien, sed como servidores que sirven a su amo sin pensar en la recompensa y el temor del cielo sea sobre vosotros. ( Pirkei Avot Capitulo 1 Mishna 3 ) 

No es el discípulo más grande que su Rav, ni es el siervo más grande que su amo. 

Es suficiente para el discípulo ser como su Rav, y para el siervo ser como su amo. Si ellos al dueño de la casa llaman Báal Zevúv, cuanto más a todos los de su casa. ( Toldot Iehoshúa 10: 24 - 25)

Ya no los llamaré siervos, por cuanto el siervo ignora lo que hace su amo, sino que los he llamado amigos míos, porque todo lo que he escuchado de mi Padre les he hecho saber. 

Recuerden la Palabra que les dije: "No hay siervo que sea mayor que su Señor". Si a mí me han perseguido, también a ustedes los perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la suya. ( Edut Ha Talmid Ha Ahuv 15:15 y 15:20)

SHAÚL de TARSUS dijo:

Hermanos, se acuerdan de nuestro trabajo y fatiga; que trabajando de noche y de día por no ser gravosos a ninguno de ustedes, proclamamos entre ustedes la Buena noticia de Elohim [acerca de la restauración de Israel]. Ustedes son testigos...., Por lo cual, también nosotros damos gracias a Elohim sin cesar, de que habiendo recibido de nosotros la palabra para oír de Elohim, la recibieron no como palabra de hombres, sino (como a la verdad lo es) como palabra del Eterno, la cual obra en ustedes los que permanecen fieles. Porque ustedes, hermanos, han sido imitadores [de las pisadas] del Mashiaj Iehoshúa"

DIVRE HA'RAV

R’ Iehoshúa Ben Iosef miNatzrát dijo: A sus Talmidím: Ustedes son sal en el mundo, si la sal cesara de cumplir su función con respecto a su sabor ¿con que se salará? No tiene ningún valor, sino que sirve para ser echada afuera, para ser pisoteada con los pies.

miércoles, 4 de abril de 2012

CASAMIENTO


Una fusión eterna
Todo el que compartió con una pareja el día de su boda se asombra por el brillo que sale de sus rostros, reflejo de la inmensa felicidad que poseen. ¿Cual es el origen de esa felicidad?

Ellos se encuentran frente al desafío de crear, de formar con sus propias manos una nueva familia. Son consientes de la importancia de esta etapa de la vida, y del milagro del que son protagonistas: traer al mundo seres humanos formados por ellos mismos. Se dan cuenta de la importancia de tomar buenas decisiones, y de las consecuencias que trae equivocarse. Es por ello que el día de su boda, Di-os les borra todas las equivocaciones que cometieron hasta ese momento en sus vidas.

De allí es que es aconsejable pedirle al novio o a la novia una bendición: ellos se encuentran sumamente compenetrados con lo que es el milagro de estar vivos, y así, sus pedidos a Di-os son otorgados al instante.

Nuestros sabios afirman que "todo va detrás del principio". La conducta con la que cada uno se comporta con el otro en esos momentos y las metas a las que deciden dirigirse a futuro, deben ser elegidas con mucha sensibilidad ya que (como sucede con un niño) una pequeña herida en la concepción será una gran marca en el futuro.
¿Simplemente un contrato?

Podríamos definir al matrimonio como un contrato, pero sabemos que si dos personas no se aman, ningún contrato es lo suficientemente fuerte como para mantenerlos unidos. La pregunta que surge entonces es: ¿Cuál es el origen de esa poderosa atracción entre el hombre y la mujer?
"Di-os creó al hombre a su imagen... mujer y hombre los creó". Nuestros sabios explican que esto se refiere a la creación de "un solo individuo con dos caras"; Di-os creó un ser y luego lo separó en dos partes, las cuales pueden volver a unirse para hacerse uno.

Como individuo independiente, una persona quedaría sin compañía, sin estimulo, sin el potencial de crecer, sin ser uno verdaderamente. Hombre y mujer son atraídos mutuamente porque individualmente nos sentimos incompletos: estamos buscando nuestra mitad.
Valorar es valorarse

El éxito de cualquier empresa depende del valor que le demos. Gran parte de los problemas que hoy viven muchos matrimonios, comenzaron por no saber valorar la empresa que ambos -marido y mujer- constituyen.

El secreto para lograrlo

En hebreo, hombre se dice ISH y mujer IYSHA. Sus letras en común, forman la palabra "fuego". El hombre y la mujer son dos fuegos: con una ética que los una en un respeto mutuo, se incrementan entre sí; sin ella, se consumen el uno al otro.

Las letras que diferencian a estas palabras, forman el nombre de Di-os; es decir, que El, ademas de ser el creador de estas partes, es quien las hace diferentes para que sean un verdadero complemento. La pareja tiene en sus manos la posibilidad de hacer que con su armonía, Di-os esté entre ellos.
Entonces, la clave de un matrimonio exitoso es valorar su santidad: la unión física es temporal, tiene un fin; pero cuando una pareja decide que Di-os los entrelace espiritualmente, puede lograr una unión eterna.
Renovación: la clave de un matrimonio exitoso

Cada integrante de la pareja judía tiene sus obligaciones hacia su mitad, sin las cuales el matrimonio puede ser disuelto.

Entonces, ¿existe el divorcio en el judaísmo?

Si. Pero nuestros sabios afirman que cuando una pareja se separa, "D's llora".

Esta metáfora refiere a que la unión que una pareja logra al casarse, es única. En ese momento Di-os los hace uno; y divorciar es partir en dos esa unidad.
No es que Di-os se oponga a la separación (ya que hay veces que decidir tomar este paso es lo mejor para los dos) sino que es un final no querido por nadie, incluso para Di-os, quien solo busca que seamos felices en todo momento.

Es por eso que antes de tomar semejante decisión, se debe hacer lo imposible por encontrar la raíz original del problema e intentar una solución.
Estadísticamente, el matrimonio basado en los consejos del judaísmo es el que registra un número ínfimo de divorcios. ¿Es que se sienten obligados a seguir casados pase lo que pase, o realmente hay algo más?

Presenciemos una noche de Shabat en un hogar tradicionalista. Ella espera a su marido con las velas encendidas y con el empeño reflejado en la mesa de Shabat. El llega y comienza a cantarle "Eshet Jail" (Mujer virtuosa), alabandola por todas sus obras. Ellos tienen en sus manos la guía para poder volver a sentirse siempre como el día que se conocieron.

Ahora estamos en condiciones de entender que para el judaísmo, el matrimonio no solo es un hecho positivo sino que es considerado como el verdadero comienzo de la vida: "Toda persona que no se casa vive sin bienestar, sin bendición, sin alegría, sin paz, sin moral, y no se llama persona.

Aprender a convivir
Uno de los temas más importantes para la vida del judío es la conducta con la que debe comportarse en su matrimonio. No debemos olvidar que gran parte de los preceptos que la Torá determina están basados en la relación con el compañero. La pareja de la persona no sólo que está incluida en este grupo, sino que es el primer ser al que debemos aprender a tratar. Ella es la que, por excelencia, nos educa a relacionarnos con nuestro prójimo.

Imaginemos una pirámide. Supongámonos al pie de ella, parados en esquinas opuestas, a 2 personas. En lugar de que se encaminen una hacia la otra, podríamos pensar que cada uno sube la pirámide de su propio lado. Entre más se acerquen a la cima, naturalmente se acercaran uno al otro. Si los 2 están dispuestos a dejar atrás parte del pasado y a comenzar a subir la pirámide, entonces podrán comenzar a crear una verdadera cercanía. Una cercanía basada en la renovación mutua de la personalidad, para así poder alcanzar el punto en común que existe entre los 2.

En el matrimonio, el respeto y la valoración mutua hacia nuestra mitad (que es lo mismo que decir, hacia nosotros mismos) es la raíz primordial que permitirá alcanzar la alegría y la felicidad que cualquier pareja anhela.

En cualquier matrimonio existen distintas formas de pensar. Normalmente se cree que debería existir por naturaleza una vida de tranquilidad y sin peleas en el hogar. Según este criterio, lo anormal es la discusión y la intolerancia. Si analizamos con más profundidad nos daremos cuenta de que el razonamiento lógico es el contrario. Sólo con el esfuerzo y la superación continua se encontrará el Shalom.
El matrimonio como lección de vida

Otro concepto importante en relación al matrimonio implica una comprensión más profunda del ser humano y de nuestro lugar en el mundo. Di´s creó al mundo como un acto de bondad. Di-os no necesita nada de la creación.
Sin embargo, dado que Él es bueno, quiso tener a quien darle su bondad. Por lo tanto Él creó al mundo para poder dar. El ser humano es el receptor máximo aquel cuyas necesidades son superiores a resto de la naturaleza. Siempre esta acostumbrado a "tomar" cosas. Ya desde que nace llora para que sus necesidades básicas le puedan ser proveídas.

Pero también a diferencia del resto de las creaciones, es más que un simple receptor. Di´s le dio al hombre la capacidad de dar. De esta manera adquiere una dimensión espiritual y se eleva automáticamente por encima de la creación. El hecho de dar es la forma más elevada de imitar a Di-os.

El matrimonio es la base para empezar a dar. La esencia del amor esta en este concepto. La misma palabra en hebreo para amor (ahavah) contiene la palabra hav, que quiere decir ¨dar¨.
El amor que existe entre un hombre y una mujer se concentra en una cosa: dar sin esperar nada a cambio, sino solamente en el placer de saber que pudimos dar. El éxito de una pareja se logra cuando ambos transforman sus actos en actos de bondad, a pesar de que el instinto natural insista en querer recibir.

Cada vez que uno da algo de sí mismo, se vuelve realmente uno con su pareja. Entonces cuando el amor entre el hombre y la mujer es la clase de amor que produce una unión espiritual, ellos y su familia tienen la dicha de tener a Di-os en su propio hogar.

Basado en: Unidos en uno, Y serán un sólo cuerpo, Hacia una vida plena de sentido.

¿TRES DÍAS Y TRES NOCHES?


PREGUNTA: ¿Qué significa la expresión 3 Días y 3 Noches?
RESPUESTA: Significa 3 días, pero no necesariamente 3 días completos y 3 noches completas.
Por Avdiel Ben Oved
De las diferentes instancias donde R' Iehoshua de Natzrat habla sobre su resurrección de entre los muertos siempre usa la frase "al 3er día", y solo una vez la frase "3 días y 3 noches" (Mt.12.40). El desconocimiento de las costumbres del mundo antiguo ha dado pie a que muchos erróneamente piensen que él estaba diciendo que estaría sepultado 3 días completos y 3 noches completas. Los siguientes breves ejemplos mostrarán que la frase: "3 días y 3 noches" no es más que "al 3er día" sin aludir a 3 días completos y 3 noches completas.
Ejemplos:
En I Reyes 15.1-2; 8-9, Avijam vino a reinar en el año 18 de Jeroboan, y murió en el 20, sin embargo se dice que su reinado fue de 3 años. Para la forma de contar moderna transcurrieron 2 años, pero para los ‘antiguos’ se cuenta el 18, el 19 y el 20 como 3 años en total, aunque no fueron completos.
Roboam envió a la congregación por 3 días (1 Reyes 12.3-5), y ellos en el 3er día retornan "como el rey había dicho" (1 Reyes 12.12). Note que no regresaron pasado 3 días, o al 4to día, sino en el mismo 3er día.
Iosef puso a sus hermanos bajo custodia por 3 días (Gen.42.17) y en el 3er día los deja ir (Gen.42.18,25).
Hechos Cap. 10:
Día 1- Hech.10.3 Un Mensajero aparece a Cornelio como a la hora novena (3 pm). Inmediatamente (10.7) envía hombres a Jope.
Día 2- Hech.10.9,17 Al día siguiente, los hombres llegaron a casa de Simón cerca de la hora sexta (12 pm).
Día 3- Hech.10.23 Al día siguiente regresan a donde estaba Cornelio.
Día 4- Hech.10.24,30 Al día siguiente llegan a donde estaba Cornelio (3 pm).
Cornelio claramente dice: "A esta misma hora, hace 4 días estaba yo orando en mi casa a la hora novena (3 pm)". Si contamos los días por las horas tendríamos 3 días y no 4; del Día 1 a las 3 pm hasta el Día 4 a las 3 pm son 3 días. Sin embargo no así para la forma de contar antiguamente.
En el Libro de Jonás (Cap. 2) dice que el profeta estuvo dentro del vientre del pez durante "3 días y tres noches" (2.1), pero el texto nunca menciona si ese conteo comenzó de noche o de día, entonces, ¿de quién fue la idea de que Jonás estuvo de 3 noches completas y 3 días completos? De alguien que no tuvo presente el mundo antiguo y sus expresiones, donde una parte de un día (mes o año) es contado como un día (mes o año) entero.
Por Avdiel Ben Oved